En el día de hoy en Revista Bilis, te traemos una selección de tres títulos que marcaron un antes y un después en el corazón de todo gamer, que salieron para la PS2.
—Por: Sebastián López y Lautaro Russo.
La PS2 fue un antes y un después en el mundo de los video juegos y la tecnología. En Argentina, se lanzó un 4 de marzo del 2000. Al día de hoy, es la consola más vendida de la historia y la que más años estuvo en el mercado.
El cambio de milenio, iba a traer consigo numerosas novedades para el mundo gaming. Muchos son los fanáticos que aun, con mucha nostalgia, recuerdan como pasaban tardes enteras con su PlayStation 2: tocando la guitarra del Guitar Hero, poniéndose en la piel de Kratos en la saga de God of War o jugando con sus amigos al modo multijugador del Grand Theft Auto: San Andreas.
Pero estos, son algunos de los títulos más conocidos de una lista enorme—aproximadamente unos 3.870—. De hecho, la PlatStation 2 es consola con más juegos en su catálogo. Fue una fuente inagotable de videojuegos que marcaron la adolescencia de millones de personas.
Pero, en esta nota, nos vamos a centrar en los que son, para nosotros, los mejores tres juegos de la consola. Caber destacar, que estos son tres títulos a índole personal y que no tiene por qué coincidir con el gusto y la subjetividad del lector. Por otro lado, se dará una argumentación de cada videojuego y habrá un apartado para una mención honorífica.
Para dar comienzo, nos centraremos en los siguientes criterios: gráficos, historia y jugabilidad. Básicamente, los tres ejes centrales de todo videojuego.
El primero de este pequeño top, es uno de los legendarios: Resident Evil 4 (2005), de la saga de Residen Evil. Esta edición, fue un antes y un después en dicha saga y en el mundo de los videojuegos en general. Por empezar, es un cambio radical en los gráficos, fruto de la mayor potencia que otorgaba la PS2 en comparación a la PS1. Sólo para tener un marco de referencia, en el mismo año, 2005, salen entregas como Call of Duty II o Prince of Persia: Las Dos Coronas. Si uno compara el apartado gráfico de estas dos entregas con el del Resident Evil 4, notará una diferencia abismal, no solo en el realismo alcanzado, sino en las texturas renderizadas y el uso que se le da a esos gráficos. La entrega de Capcom sabe ambientar muy bien un pasaje desolador, como el de un pueblo del sur de España, cubierto por una densa bruma, como el de un lóbrego castillo medieval, para finalizar con una inquietante y desbastada isla. Resident Evil, supo aprovechar muy bien la potencia brindada por la nueva consola—atisbos que ya había mostrado con Resident Evil: Code Verónica (2000).
Capcom, implementó la cámara en tercera persona dentro de su saga con esta nueva entrega. No sólo eso, la nueva propuesta de la compañía japonesa fue una revolución pionera en el género shooter. No solo que ahora teníamos una cámara en tercera persona dentro de la famosa saga de zombies; sino que también descubríamos la utilización del famoso plano americano del cine, dentro de los videojuegos. Esta nueva manera de controlar al protagonista, a día de hoy, sigue sin ser superada y es la más utilizada en juegos shooters en tercera persona. Sin dudas, Resident Evil 4 fue un punto de inflexión en el mundo de los videojuegos.
Por otra parte, la historia de Leon vino a romper con la monotonía de la temática zombie dentro de la saga. En su lugar, en esta entrega habría pacientes infectados con un extraño tipo de parásito—las plagas—, los cuales conformarían un extraño y sádico grupo sectario, de índole religioso. Todo esto, acompañado de las posibilidades ambientales que albergan los parajes rurales del sur de España.
Sin embargo, el juego no estuvo exento de polémicas. Para muchos fieles amantes de la saga, la entrega fue una ofensa al nombre de Resident Evil, por haber alejado a los títulos del género del terror, para adentrarse en el mundo de la acción. Sin embargo, cabe destacar que Resident Evil 4 fue la última entrega de Shinji Mikami, el director original del proyecto. Si bien es cierto que el terror se ve despojado por cierto protagonismo de la acción dentro del juego, la entrega fue un golpe de aire fresco para la saga, sin abandonar el espíritu y la idiosincrasia de Resident Evil: los puzles siguen presentes en el juego—en mucha menor medida—, los documentos siguen siendo claves para descifrar el lore y todo el juego está envuelto en un manto de tensión constante, a pesar de la acción desenfrenada. A día de hoy, el juego puede parecer un desquicio de tiros—sobre todo, la parte final—; pero, en su momento, se seguía identificando perfectamente la esencia de Resident Evil, con una agregado superador en su entrega jugable. Todo esto, se perdería con la quinta entrega, en donde poco quedaría de ese espíritu e idiosincrasia; haciéndose más que notable la ausencia de Mikami.
En lo que respecta a la historia, si bien la misma puede pecar de caer en la típica narrativa de un héroe americano, esta consigue atraparnos. En especial, uno se termina encadenando a la historia de los “Iluminados”—este grupo sectario—y las monstruosidades biológicas que desarrolló su líder, Lord Osmund Saddler. A continuación, les mentregamos un breve resumen de la historia de dicha entrega.
Sinopsis: «El argumento del juego nos pone en la piel de Leon Scott Kennedy, sobreviviente del desastre vírico que destruyó a Raccoon City, convertido ahora, seis años después de este suceso, en un agente del Servicio Secreto de los Estados Unidos; enviado a una zona rural de España, con la misión de rescatar a la hija del Presidente de los Estados Unidos, Ashley Graham, que fuera secuestrada por una secta que opera en la zona. La investigación de Leon se complica luego de que una horda de aldeanos enfurecidos lo ataquen sin razón aparente.»1
En segundo lugar, mencionaremos a un videojuego perteneciente a una saga exclusiva de Sony, y que fue una de las últimas entregas que ofreció la PlayStation 2. Estamos hablando de una saga mítica como lo es God of War; concretamente, nos referimos a God of War II (2007). No es una locura plantear que la segunda entrega del Dios de la Guerra, es uno de los mejores juegos del género hack and slash de todos los tiempos. Esta secuela de la historia de Kratos, llevó a la PS2 a los límites de su potencia; superando lo que alguna vez hubiésemos imaginado de la consola. No solo destaca el realismo del apartado gráfico, sino que también asombra el mapeado extraordinario y único que tiene este videojuego.
Esta segunda entrega, vino a continuar y mejorar todo lo que nos había deslumbrado en God of War original. Con bosses únicos, un ritmo frenético, acción imparable y ambientaciones memorables, God of War II se convertiría, sin lugar a dudas, en el juego que mayor provecho le sacó a la PlayStation 2. Tanto así, que el videojuego, al igual que el Resident Evil 4, sigue siendo perfectamente disfrutable al día de hoy. Es una entrega que podemos llamar “adelantada a su época”, y que salió en una consola que jamás hubiésemos imaginado que podía correrlo.
Por otro lado, la historia es un mejorado exorbitante respecto a la anterior entrega. En esta segunda edición, la narrativa se aleja de ese arco argumentativo cliché de la Mitología Griega y se anima a tocar cuestiones y aspectos muchos más profundos y delicados; como son: la tragedia, el destino, la ira, etc. Claramente, desde el aspecto argumental, God of War II es una entrega mucho más madura y profunda que su antecesor y es un apartado en el que destaca. Se puede decir que, con esta segunda edición, Kratos terminó de adentrarse en el corazón de todos los gamers y se consolidó como un ídolo histórico de los videojuegos.
En lo que respecta a su jugabilidad, la misma se siente mucho más pulida y existe una mayúscula cantidad de recursos añadidos, tanto en las mecánicas ofensivas, como en elementos tales como los saltos, Pegaso y las alas de Ícaro. Además de esto, el juego destaca en sus jefes; teniendo, además, uno de los combates más memorables de la historia de la PS2: el combate final contra el Dios del Olimpo.
A continuación, les dejamos un breve resumen de la narrativa de dicho juego.
Sinópsis: “Kratos, el nuevo dios de la guerra tras la muerte de Ares, todavía está atormentado por las pesadillas de su pasado y es rechazado por los otros dioses por sus formas destructivas. Ignorando las advertencias de Atenea, Kratos se une al ejército espartano en un ataque a Rodas, durante el cual un águila gigante de repente drena una gran parte de sus poderes y lo usa para animar al Coloso de Rodas. Mientras lucha contra la estatua, Zeus le ofrece a Kratos la Hoja del Olimpo, una poderosa espada que Zeus había usado para terminar la Gran Guerra, lo que requiere que Kratos infunda la espada con el resto de su poder divino. Aunque mortal una vez más, Kratos derrota al Coloso pero está mortalmente herido. El águila revela haber sido Zeus todo el tiempo, quien afirma que se vio obligado a intervenir porque Atenea se negó a hacerlo. Zeus luego le otorga a Kratos una última oportunidad para ser leal a los dioses, pero Kratos se niega. Enfurecido por su desafío, Zeus lo mata con la espada y destruye al ejército espartano.
Kratos es arrastrado lentamente al inframundo, pero es salvado por la Titán Gaia. Gaia le dice a Kratos que una vez crio al joven Zeus, quien finalmente traicionó a los Titanes como venganza por la crueldad infligida a sus hermanos por el padre de Zeus, Cronos. Ella le indica a Kratos que encuentre a las Hermanas del Destino, quienes pueden alterar el tiempo, evitar su muerte y permitirle vengarse de Zeus.”2
Y por último, y no menos importante, tenemos a la segunda entrega de la que es, sin lugar a dudas, la más grande saga de terror de toda la historia de los videojuegos. Estamos hablando, de Sillent Hill 2 (2001).
Silent Hill 2 (en español «Colina Silenciosa 2») es la segunda entrega de la serie de videojuegos Silent Hill y el primer juego de la franquicia que se publicó para PlayStation 2. Se lanzó en Norteamérica el 24 de septiembre de 2001 para la PlayStation 2 de Sony. Esta, fue la secuela del mejor y más importante videojuego de terror de toda la historia: Silent Hill, para la PS1. Ardua era la tarea de Konami, al intentar estar al nivel de lo que fue la entrega primogénita de esta saga. Sin embargo, ya les adelantamos que la empresa japonesa logró estar a la altura.
La primera entrega, nos había adentrado en lo que era manejar un personaje que no era un héroe ni un miembro de la fuerza. Además de esto, el juego ya nos había sumergido en el terrorífico mundo de la ciudad de Silent Hill. Esta segunda entrega, no sólo va a continuar con estos dos apartados extraordinarios para el survival horror, sino que, además, va a introducir lo que sería su arista más destacada: el terror psicológico. En esta oportunidad, la historia no irá en torno a una secta satánica, como en la primera entrega, sino, más bien, a la propia guerra interna que el protagonista tiene con su propio inconsciente. Dicho protagonista, es James Sunderland; un nombre que se nos quedaría grabado en la mente a todos los que tuvimos la suerte de jugar a Silen Hill 2 en su día. La historia detrás de la angustiosa muerte de su mujer, Mary, y la recopilación, poco a poco, y por nuestra parte, de las verdaderas causas de su fallecimiento, logran que uno se quede absolutamente atrapado y embebido en la narrativa de Silent Hill 2; que, sin miedo a decirlo, cuenta con uno de los mejores arcos argumentativos de toda la historia de los videojuegos. Digno de una novela Best-Seller. Una particularidad de esta entrega, es la conexión que existe entre sus jefes—reducidos en número, eso sí—y la historia detrás del inconsciente de Sunderland. Producto de esta ecuación, nace uno de los jefes más memorables de toda la historia de los videojuegos: Pyramid Head; el cual representa la frustración sexual del propio Sunderland, ante la imposibilidad de realizar el coito con su mujer, afligida por una severa enfermedad.
En el apartado gráfico, Silent Hill 2 cuenta con una calidad más que excelsa. Con un nivel de detalles extraordinario para la época, esta secuela logra impregnar sus ambientes con la tonalidad funesta y degradante que intenta expresar. Todo lo que se hizo en el Silent Hill original, la segunda entrega parecía llevarlo a un nivel superior. Cierto es que, en el apartado jugable, la obra deja cierta inconformidad, puesto que el videojuego cuenta con pocos enemigos, limitadas variaciones jugables y escasos puzles memorables. Aun así, la narrativa logra atrapar al jugador y la conexión lúdico-narrativa impregnan un sello único en dicha entrega.
Otro aspecto insorteable que debemos hondar, es el final de dicha obra. El videojuego, en esta oportunidad, nos va a dar la posibilidad de obtener un final diferente en base a nuestro desarrollo durante la partida; aunque hay cierta unanimidad en la comunidad gamer, respecto al final canon del juego—si usted es entendido en la materia, nos referimos al final del lago—. Esta posibilidad, sumado a la verdad tan oscura que nos revela el juego momentos antes del final, hacen que Silent Hill 2 tenga uno de los finales más memorables de la sexta generación. No obstante, tanto el final, como el desarrollo del juego, ciertamente recaen en una gran repetición, sumado a que la obra no cuenta con jefes finales. Es por ello, que Silent Hill 2 puede ser considerado el mejor juego de terror de la PS2; pero se ubica un escalafón por debajo de las grandes obras de la consola.
Como con las otras dos entregas, les brindamos un breve resumen de la argumentación del videojuego de Konami.
Sinopsis: «El protagonista es James Sunderland, quien recibe una carta de su esposa Mary, que murió algún tiempo antes de los eventos del juego. En la misma, ella le pide que vaya a la ciudad turística de Silent Hill. Pero al llegar a su destino, James se encuentra con una misteriosa mujer llamada María, una copia casi exacta de su esposa.»3
Por último, nos queda nombrar una mención honorífica. Por temas de extensión de la nota, no le dedicaremos el mismo espacio que a las otras tres obras; pero sí que hubiésemos recaído en una injusticia mayúscula de no haberlo mencionado. El juego del que estamos hablando, es Metal Gear Solid 2: Sons of Liberty (2001). La primera entrega de la saga de Kojima, para la PS2, fue un videojuego que vino a continuar todo lo que había logrado su antecesor (1998, PS1). Esto era, ni más ni menos, entender a los videojuegos como un arte y no como un mero apartado lúdico.
En lo que respecta al apartado gráfico, Metal Gear Solid 2 consta con un nivel asombroso. En el apartado jugable, la conexión lúdico-narrativa seguía presente y la idea de ser algo más que un pasatiempo lúdico se respira en esta obra. Además de esto, hay que mencionar que dicha saga cuenta con una de las mejores narrativas de la historia de los videojuegos, y que, para este segundo episodio, Kojima no se quedó atrás en su talento como creador de historias. Sin embargo, la entrega es claramente inferior a su antecesor; y es por ello que no ha logrado ingresar al top tres de Revista Bilis.
- Extraído de: https://residentevil.fandom.com/es/wiki/Resident_Evil_4 ↩︎
- Extraído de: https://es.wikipedia.org/wiki/God_of_War_II ↩︎
- Extraído de: https://es.wikipedia.org/wiki/Silent_Hill_2 ↩︎
